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Caso del mes de Septiembre de 2022

Recién nacido femenino de 32.3 semanas de gestación.

Dra. Claudia Peña Zepeda
Hospital Central "Dr. Ignacio Morones Prieto"
San Luis Potosí
Servicio De Anatomía Patológica

Historia Clínica:

Recién nacido femenino de 32.3 semanas de gestación.
Madre de 40 años, G 3, C 2.
Ingresó con trabajo de parto pretérmino, datos de corioamnionitis y desprendimiento de placenta, nacimiento por cesárea, APGAR 6-9, 1170 g de peso y 38 cm de talla. 
Al nacer presentó lesiones en la piel de tronco y extremidades superiores e inferiores caracterizadas por pápulas eritematosas. 
Cursó con neumonía in utero, hipertensión pulmonar persistente del recién nacido y sepsis temprana.
Requirió manejo con ventilación asistida por 60 horas, ampicilina intravenosa. 

Placenta:

Placenta monocorionica mono amniótica de 363 g.
Disco placentario de 15.5 X 11 X 1.3 cm.
Cordón umbilical de 16.5 x 1 cm , de inserción excéntrica, trivascular  e hipergirado.
Membranas corioamnióticas gruesas, opacas y despulidas.
Cara fetal con trayectos vasculares tortuosos y congestivos.
Cara materna rojiza con moteado amarillento.
Al corte, múltiples áreas de infarto (30% aproximadamente).

 

Preguntas:

1.- El peso de la placenta es: 
A. Peso adecuado para la edad gestacional 
B. Peso bajo para la edad gestacional 
C. Peso elevado para la edad gestacional 

2.- De acuerdo a los hallazgos observados, ¿cuáles serían sus posibilidades diagnósticas? 
A. Infección bacteriana pura
B. Infección bacteriana y viral
C. Infección por hongos y bacterias 

3.- De acuerdo a su diagnóstico, ¿cuáles son las claves histológicas? (elige la/las correctas)
A. Corioamniotis aguda necrozante 
B. Funisitis aguda necrozante 
C. Intervillitis con formación de micro abscesos
D. Bacterias bacilares Gram +

4.- ¿Cuál considera la vía de infección para la madre? 
A. Infección de tracto urinario y/o vaginal 
B. Infección de transmisión oral 
C. Transmisión sexual

 

 

Respuesta:

LISTERIA MONOCYTOGENES

Las infecciones por Listeria monocytogenes en el periodo neonatal constituyen una causa importante de morbi- mortalidad principalmente en países de economía emergente. Esta bacteria es poco común en la población inmunocompetente, sin embargo las embarazadas tienen un riesgo relativo 20 veces mayor de padecer la infección y está directamente relacionada con sus hábitos de alimentación, principalmente por la ingesta de alimentos crudos o no procesados, especialmente productos lácteos no pasteurizados . 
Se le ha asociado con una elevada mortalidad fetal o neonatal, por infección transmitida a través de vía hematoplacentaria, produciendo sepsis. 

Los gérmenes causales más frecuentes de la sepsis neonatal temprana son estreptococo del grupo B, Escherichia coli y otras enterobacterias. Sin embargo, Listeria monocytogenes también ocupa un lugar importante, su infección se denomina listeriosis y es transmitida por alimentos, la cual tiene una tasa de mortalidad es de 20 a 30%. 

La Listeria monocytogenes es un bacilo o cocobacilo grampositivo, móvil, anaerobio, facultativo e intracelular que se adapta a los cambios ambientales extremos.

Se conocen seis especies del género Listeria: L. monocytogenes, L. innocua, L. ivanovii, L. seeligeri, L. welshimeri y L. marthii, solo L. monocytogenes es patogénica para el hombre. Así mismo 13 serotipos de L. monocytogenes, de los cuales 1/2a, 1/2b y 4b son los responsables de la mayoría de los casos clínicos.

La sospecha de sepsis neonatal por Listeria monocytogenes, debe establecerse en aquellas madres que consumen leche cruda o bronca, quesos no pasteurizados o algún otro.

En los lactantes, la listeriosis se conoce como Granulomatosis infantiseptica y se caracteriza por abscesos visibles, a menudo se presenta una erupción en el recién nacido, y la meningitis neonatal es otra complicación grave de la infección fetal por este organismo.

El diagnóstico se establece a partir de cultivos, así como los títulos de antilisteriolisina O que se desarrollan rápidamente después de la infección.

Patología: Característicamente la placenta tiene peso elevado para la edad gestacional. Macroscópicamente tiene opacidad de la superficie fetal y las membranas placentarias, (en ocasiones se describe como verdosa), los típicos abscesos intervellosos pueden verse en los cortes transversales de la placenta. Si se realizan frotis en estas lesiones se pueden observan elementos bacterianos de tipo bacilar con tinción de Gram. En el examen microscópico, se ven abscesos vellosos, necrosis de las vellosidades y villitis aguda. Los abscesos suelen tener un área central de necrosis y suelen estar compuestos por una gran cantidad de neutrófilos, que rodean e infiltran las vellosidades La villitis puede ser necrotizante y estar asociada con la destrucción de las vellosidades. Este patrón también puede ocurrir ocasionalmente en septicemias maternas debidas a Staphylococcus y E. coli, y con poca frecuencia con otros organismos como Campylobacter y Chlamydia, pero en estos últimos casos las vellosidades casi nunca se involucran en los casos comunes de corioamnionitis, por grave que sea el proceso. 

En el caso de Listeria, la presencia de abscesos placentarios puede deberse a septicemia fetal, correspondiendo a abscesos similares en el feto. El amnios comúnmente contiene abundante crecimiento bacteriano y la corioamnionitis aguda suele ser grave. La funisitis aguda también puede estar presente. Dado que las bacterias prosperan en condiciones de baja temperatura, a menudo proliferarán durante el almacenamiento en frío de la placenta antes del examen. 

El diagnóstico definitivo se realiza a través de cultivos seriados de sangre, líquido cefalorraquídeo (LCR) o líquido amniótico. Esta bacteria posee similitud morfológica con difteroides y estreptococos, precisando de pruebas bioquímicas para su confirmación.

Su diagnóstico oportuno es importante porque la terapia rápida con ampicilina cura rápidamente la infección materna y fetal. Cuando la listeriosis se reconoce durante el embarazo y se trata adecuadamente, los abscesos placentarios pueden sufrir “cicatrización”, los cuales son reconocibles histológicamente como un absceso antiguo, ya que no se produce una verdadera formación de cicatriz en la placenta. Los abscesos en el feto en una infección resuelta probablemente tengan un destino similar.

 

RESPUESTAS:

1. El peso de la placenta es:
A. Peso adecuado para la edad gestacional 
B. Peso bajo para la edad gestacional 
C. Peso elevado para la edad gestacional 

El peso de la placenta debe de ser eleveado, para la edad gestacional en las infecciones bacterias siempre es esperado que sea así 


2. De acuerdo con los hallazgos observados, cuales serían sus posibilidades diagnosticas:
A. Infección bacteriana pura
B. Infección bacteriana y viral
C. Infección por hongos y bacterias 

Infección bacteriana pura, las infecciones por virus se caracterizan por la presencia de células plasmáticas y las infecciones o por hongos no causas funisitis  ni corioamnioitis tan intensas


3. De acuerdo con su diagnóstico, cuáles son las claves histológicas en el diagnostico (elige La/las correctas)
A. Corioamniotis aguda necrotizante 
B. Funisitis aguda necrotizante 
C. Intervillitis con formación de miro abscesos
D. Bacterias bacilares Gram +

Las claves diagnosticas son la villitis necrotizante y los abscesos intervellosos, que no son comunes en los otros tipos de infecciones bacterianas


4. Cual considera la vía de infección para la madre
A. Infección de tracto urinario y/o vaginal 
B. Infección de transmisión oral 
C. Transmisión sexual

La madre la adquiere por vía oral, pero el producto por vía hematógena. 

 

BIBLIOGRAFIA

1. Mejia Elizondo Ana Ruth, Lina Rogel Victoria , Peña Zepeda Claudia  
Infección por Listeria monocytogenes en la etapa neonatal en un hospital público de San Luis Potosí, México. Archivos de investigación pediátrica de México. Vol 12, No. 2 Abril-Junio, 2020

2. Manual of pathology of the Human placenta. 2da ed , 2011. Pag 293-294

3. Castañeda-Ruelas G, Eslava-Campos C, Castro-del Campo N, León-Félix J, Chaidez-Quiroz C. Listeriosis en México: importancia clínica y epidemiológica. Salud Publica Mex. 2014;56:654-659.

4. Walker O, Kenny C, Goel N. Neonatal sepsis. Pediatr Child Health. 2019;2 (6):263-268

5. Camacho-González A, Spearman PW, Stoll BJ. Neonatal infectious diseases: evaluation of neonatal sepsis. Pediatr Clin North Am. 013;60(2):367-89. 

6. Solorzano F, Miranda M. Infección por Listeria monocytogenes. En: González N, Saltigeral P, Macías M. Infectología Neonatal. México: McGraw-Hill, 2006; 246-50. 

7. Cook J, Graves L, Krikham C. Listeriosis in pregnancy: Practitiones’ food safety counselling practices to pregnant women. J Obstetric Gynaecol Canada. 2018; 40(9):1139- 1147.